La clase de 3º D tenía música asi que todos bajaron al aula, Chloe (un poco tardona, como siempre) cogia su abrigo azul y se disponía a salir de clase.
Yendo ya por el pasillo, distraida como de costumbre, se chocó con un chico aparentemente mayor que ella, alto, guapo, "cachas" ... pero ella solo pudo ver su sonrisa, blanca como la nieve, aunque con un trozo de chocolate en los dientes (posiblemente del tentempié de mediamañana) y a pesar de eso no le pudo mirar su bella sonrisa, subió la vista hacia la nariz, si.. tenia una pequeña mucosidad, diminuta y redondita pero una mucosidad( moco, si preferis...) y tampoco le daba asco.
Al fin llegó a los ojos, verdes esmeraldas quizá algo azulados , quien sabe... eran perfectos y se enamoró de ellos.
Él la pidió disculpas y Chloe respondió que no pasaba nada, inesperadamente para ella que ya estaba casi bajando las escaleras, oyó que aquel chico le llamaba, una voz dulce que decía:
-¿Cómo te llamas?
Anonadada al ver que aquel chico aparentemente "perfecto" se interesaba por ella, se empezó a poner nerviosa, sintió algo en el estomago (no era un cosquilleo) era algo... raro, se puso pálida pero al final no pudo contenerse y... se tiró una flatulencia o si preferis un "pedo".
Avergonzada y roja como un tomate oyó la campana, la excusa perfecta, y le dijo sin mirarle a la cara adiós... bajó corriendo las escaleras y se fué para clase... sin poder oír al chico que suspiraba...
-Te digo adiós pero espero que no sea un hasta nunca...